Los animales no pueden tener síndrome de Down como los humanos, y los perros tampoco. Este síndrome está causado por una trisomía del cromosoma 21, y como cada especie tiene una configuración genética distinta, no es posible que otros animales desarrollen exactamente esta alteración. Aunque algunos pueden presentar condiciones genéticas que generen signos parecidos, no se trata del mismo trastorno.
El síndrome de Down es uno de los trastornos genéticos más comunes entre los seres humanos. Sin embargo, mucha gente se pregunta si también puede haber animales con síndrome de Down.
Durante años, Internet nos quiso hacer creer que sí. No hay que hacer más que una búsqueda rápida para encontrarse con animales que se han hecho famosos en las redes sociales por sus rasgos similares al síndrome de Down.
Pero nada más lejos de la realidad.
¿Los perros tienen síndrome de Down?
Aunque puedan presentar trastornos muy similares, la respuesta sencilla es no. El síndrome de Down es una enfermedad exclusivamente humana, ya que la organización cromosómica de los seres humanos es diferente de la presente en otros animales.
Los humanos tienen 23 pares de cromosomas en sus células frente a los 31 que tienen los perros. El síndrome de Down se produce cuando hay una copia extra (total o parcial) del cromosoma 21, lo cual se denomina trisomía 21.
En este sentido, la pregunta más acertada sería «¿es posible el síndrome de Down en los perros?». El hecho de que un perro u otro animal tenga el cromosoma 21 no significa que funcione exactamente igual que en un humano.
Por lo tanto, una anomalía en el cromosoma 21 de un perro no produciría necesariamente los mismos síntomas que el síndrome de Down en las personas.
¿Existen otros animales con síndrome de Down?
Siguiendo con la argumentación expuesta, cabe destacar que muchos animales ni siquiera tienen el cromosoma 21. Por ejemplo, los gatos sólo tienen 19 pares de cromosomas (38 en total).
Los simios son los animales que desarrollan una condición más parecida al síndrome de Down. Ellos tienen 24 pares de cromosomas, y su cromosoma 22 es muy similar al cromosoma 21 de los humanos.
Existen estudios sobre un caso de un chimpancé que había desarrollado un cromosoma 22 adicional, lo que provocó síntomas similares a los del síndrome de Down. El chimpancé tenía problemas de corazón, defectos de crecimiento y se quedó ciego a los 7 años.
Sin embargo, los científicos afirmaron que la condición era análoga al síndrome de Down, es decir, son patologías similares, pero su base patológica es diferente.
Afecciones que se parecen al síndrome de Down en otras mascotas
En los perros puede darse el caso de confundir algunas afecciones congénitas o del propio desarrollo por su similitud con el síndrome de Down.
El hipotiroidismo congénito es un buen ejemplo. Esta condición es causada por niveles bajos o inexistentes de la hormona tiroidea al nacer y durante los primeros meses, lo que resulta en alguna combinación de lo siguiente:
- Crecimiento lento que acaba provocando una baja estatura.
- Lengua grande y protuberante.
- Extremidades cortas.
- Falta de tono muscular.
- Déficit cognitivo.
- Retraso en la apertura de los ojos y oídos.
Otras afecciones de los perros que pueden confundirse con el síndrome de Down son:
- Enanismo hipofisario.
- Hidrocefalia congénita.
- Deficiencia de la hormona del crecimiento.
- Derivación portosistémica.
Si has observado alguna de las características anteriores en tu perro, consúltalo con el veterinario. Te recomendará un plan de diagnóstico adecuado para ver si tu perro o perra tiene algún problema de salud.
Preguntas frecuentes sobre el síndrome de Down en perros
¿Por qué algunas personas dicen que su perro tiene síndrome de Down?
Algunas anomalías genéticas o trastornos congénitos en perros pueden provocar síntomas que se parecen al síndrome de Down en humanos, como rasgos faciales inusuales, problemas de desarrollo, dificultades cognitivas o de coordinación. Por eso algunas personas usan este término de forma coloquial, aunque no es científicamente correcto.
¿Qué condiciones pueden imitar los síntomas del síndrome de Down en perros?
Algunas de las condiciones que pueden parecerse son:
- Hipotiroidismo congénito
- Hidrocefalia (líquido en el cerebro)
- Problemas genéticos o neurológicos
- Anomalías en el desarrollo embrionario
¿Cuáles son los síntomas de una posible anomalía genética en un perro?
Algunos síntomas visibles pueden incluir: rasgos faciales inusuales, cabeza o cráneo anormalmente pequeño, problemas de visión u oído, retraso en el crecimiento, coordinación pobre o comportamiento inusual o letargo.
¿Qué debo hacer si creo que mi perro tiene una anomalía genética o de desarrollo?
Llévalo al veterinario lo antes posible. Cuanto antes se identifique una condición, mayores son las posibilidades de mejorar su calidad de vida mediante tratamientos, terapias o ajustes en el cuidado diario.
¿Son muy comunes estas condiciones en perros?
No son muy comunes, pero pueden presentarse. Algunas razas pueden estar más predispuestas a ciertas condiciones genéticas. La cría responsable y los chequeos veterinarios ayudan a reducir el riesgo.
¿Existe tratamiento para las condiciones genéticas en perros?
No existe una cura para muchas de estas condiciones, pero sí tratamientos para controlar los síntomas, mejorar la calidad de vida y prolongar la esperanza de vida del perro. Esto puede incluir medicamentos, terapias físicas, ajustes dietéticos y apoyo emocional.
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