¿Qué parásitos puede tener un conejo?

Si tienes un conejo, seguramente te habrás dado cuenta que no externalizan demasiado si tienen alguina enfermedad como un perro o un gato. Con algunos tipos de parásitos que causan enfermedades graves es importante saber a qué prestar atención y cómo protegerlos.

El principal tipo de parásito que suelen tener los conejos es el oxiuro o lombriz intestinal.

Este pequeño nemátodo interno se transmite al comer los excrementos de otro conejo infectado (comer excrementos es una parte esencial de su dieta y ciclo digestivo normales), una práctica que se conoce como cecotrofia y que es vital para los conejos ya que deben hacer una doble digestión. No obstante, si ingieren por error las heces de otro conejo infectado pueden contraer este tipo de enfermedad.

Aunque no suelen causar ningún problema de salud grave en los conejos y pueden pasar desapercibidos durante mucho tiempo, sí pueden provocar picores y molestias en el trasero de tu conejo.

Por otra parte, los conejos también pueden infectarse con tenias o gusanos estomacales. Pero esto sucede en raras ocasiones, ya que no pueden transmitir las tenias, a menos que sean presa de un depredador, ya que las tenias no pueden completar su ciclo vital en tu conejo.

Además, al igual que perros y gatos, los conejos también son susceptibles a las pulgas, especialmente si vives en un hogar con perros y gatos.

Síntomas sospechosos de que tu conejo puede tener parásitos

¿Cómo saber si conejo tiene parásitos? A menudo no habrá ningún síntoma o sólo unos muy leves.

En el caso de parásitos internos en conejos:

• Podrás observar que tu conejo se rasca y se muerde mucho el trasero o que tiene pequeños gusanos blancos alrededor del ano o en las heces (en el caso de los oxiuros, se suelen ver como pequeños granos de arroz en las heces y alrededor del ano).
• La pérdida de peso o el mal estado del pelaje también pueden ser signos de una infestación de gusanos.
• Las tenias pueden hacer que los conejos desarrollen quistes en la piel y el hígado.
• Las crías de conejo suelen estar más afectadas que los adultos y los signos pueden incluir letargo, pérdida de peso considerable y diarrea.

En el caso de parásitos externos en conejos:

• Los signos de una infección por ácaros en conejos:
  • Verás caspa o piel escamosa.
  • Tu conejo empezará a realizar aseos excesivos de cualquier zona.
  • Pérdida de pelo.
  • Sacudidas de cabeza.
  • Acumulación excesiva de cera en los oídos.
• Si tu conejo sufre una infestación por pulgas:
  • Verás que tu conejo se mordisquea la piel. Si tienes más de un conejo, o cualquier otra mascota con pelo en casa, puede que veas que también les pica. Incluso puede que te pique a ti mismo, y que veas bultos rojos en tu piel donde te han picado las pulgas, especialmente si tu conejo vive en el interior.
  • Aunque son difíciles de detectar, también podrás ver pulgas vivas en el pelaje de tu conejo si separas el pelo o lo acaricias hacia atrás.
  • Anemia. En conejos muy infestados de pulgas se puede causar tanta pérdida de sangre que el conejo se vuelve anémico. Esto puede manifestarse como debilidad y encías pálidas.
  • Pérdida de pelo . Verás zonas con falta de pelo y descamación de la piel parecida a la caspa

¿Qué pasa cuando un conejo tiene parásitos?

Si crees que tu conejo puede tener algún tipo de parásito, lo mejor es que acudas al veterinario. Allí le podrán realizar un examen físico completo y revisar a tu conejo desde la nariz hasta las nalgas.

Un programa regular de desparasitación preventiva también ayudará a proteger a tu conejo. Conoce nuestros planes de salud:

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Como habrás comprobado, hay parásitos que causan los mismos signos clínicos. Por eso, siempre es necesario buscar atención veterinaria y asegurarse de que el producto elegido para desparasitar es correcto.

Sin una investigación veterinaria exhaustiva, puedes estar tratando a tu mascota para el parásito equivocado, lo que te hará perder tiempo y dinero y, mientras tanto, el bienestar de tu mascota se verá afectado.

En el veterinario le podrán realizar un examen físico completo y revisar a tu conejo desde la nariz hasta las nalgas. Si existe el riesgo de que tu conejo esté infestado, podría recomendarse realizar otras pruebas como pruebas coprológicas para tratar de identificar los parásitos.

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