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La cojera en perros es un problema común que preocupa a muchos dueños de mascotas. Aunque a simple vista el síntoma es evidente, desentrañar la causa subyacente de dicha cojera puede ser todo un desafío.
En este artículo, hablaremos más en profundidad sobre las posibles causas de la cojera en perros, sus síntomas asociados y las opciones de tratamiento disponibles para ayudar a nuestras mascotas a recuperar su movilidad.
Causas comunes de la cojera en perros
A continuación, te contamos algunas de las causas más comunes que provocan la cojera en los perros.
Lesiones
Sin duda, una de las causas más comunes. Las lesiones pueden ser resultado de caídas, golpes, choques o incluso algún accidente. Dependiendo de la gravedad del traumatismo, los huesos, músculos y articulaciones pueden sufrir, y por tanto, provocar dolor y dificultad para caminar.
Artritis
La artritis es una enfermedad degenerativa de las articulaciones que afecta tanto a humanos como a perros. En el caso de estos últimos, la afección por artritis puede manifestarse en forma de cojera.
Normalmente suele ser más común en perros mayores, aunque algunas razas son más propensas a desarrollarla a una edad temprana por su condición genética.
Luxación de rótula
Cuando el hueso de la rodilla del perro se desliza fuera de su posición normal se produce una luxación de rótula, que puede causar dolor y cojera. Esta afección es más común en perros de razas pequeñas y muchas veces puede ser congénita.
Lesiones de ligamentos
Las lesiones de los ligamentos, como la rotura del ligamento cruzado anterior, suelen ser muy comunes en perros activos. Estas lesiones suelen ser bastante dolorosas para los perros y, a menudo, pueden requerir una cirugía para reparar los ligamentos.
Infecciones
Algunas infecciones, como las infecciones en las almohadillas de las patas o los abscesos, también pueden causar cojera en los perros. Generalmente, además de la cojera, suelen provocar hinchazón y enrojecimiento de la zona afectada.
Enfermedades sistémicas
Ciertas enfermedades sistémicas como la enfermedad de Lyme o la leishmaniosis, pueden manifestarse como cojera en perros ya que dañan las articulaciones y los tejidos conectivos.
Síntomas de la cojera en perros
Es importante destacar que los síntomas de la cojera en perros pueden variar según la causa subyacente y la gravedad de la afección.
Más allá de problemas a la hora de andar, la cojera en perros se puede manifestar de diferentes formas:
- Elevación de la pata: En algunos casos de cojera, el perro puede elevar la pata afectada del suelo para así evitar apoyar peso en ella. Esto es especialmente común cuando la cojera es causada por una lesión aguda o un dolor localizado en la zona que evita apoyar.
- Hinchazón: En algunos casos de cojera, puede observarse hinchazón en la extremidad afectada ya que la inflamación es una respuesta natural del cuerpo a lesiones o infecciones.
- Rigidez: Los perros que sufren de cojera debido a enfermedades articulares, como la artritis, pueden mostrar rigidez en las articulaciones.
- Cambios en la postura: Para compensar la cojera, el perro puede cambiar su postura al pararse o caminar inclinando su cuerpo hacia un lado para reducir la presión sobre la extremidad afectada.
Tratamiento de la cojera en perros
Aunque el tratamiento de la cojera en perros depende en gran mayoría de la causa subyacente y de la gravedad de los síntomas, sí que hay una serie de cuidados que puedes llevar a cabo para aliviar el malestar de tu mascota.
Reposo
En algunos casos, el reposo es una parte crucial del tratamiento. Limitar la actividad física de tu perro ayuda a evitar que la lesión empeore y permite que la extremidad afectada se recupere adecuadamente.
Es por esto que es crucial seguir las recomendaciones del veterinario en cuanto al tiempo de reposo necesario.
Medicamentos
Cuando el dolor es intenso, el veterinario puede recetar medicamentos para aliviar el malestar y reducir la inflamación en la zona afectada como antiinflamatorios no esteroides (AINEs) o analgésicos.
Asegúrate de administrar los medicamentos según las indicaciones del veterinario para garantizar una recuperación óptima.
Cirugía
En situaciones de lesiones graves, como fracturas óseas, luxaciones o roturas de ligamentos, la cirugía veterinaria puede ser la mejor opción para reparar la lesión y restaurar la función normal de la extremidad.
Fisioterapia
La fisioterapia desempeña un papel importante en la recuperación de la cojera en perros. Los ejercicios terapéuticos, la movilización pasiva de las articulaciones y otras técnicas pueden ayudar a restaurar la fuerza y la movilidad de la extremidad afectada. Un fisioterapeuta o traumatólogo veterinario con experiencia puede diseñar un programa de rehabilitación adecuado para tu mascota.
Cómo evitar que mi perro cojee
- Controla su peso: El exceso de peso supone una tensión adicional en la extremidad, lo que aumenta el riesgo de lesiones y de enfermedades articulares como la artritis. Mantener a tu mascota en un peso saludable a través de una dieta adecuada y ejercicio regular es una de las medidas más importantes que puedes tomar para evitar la cojera.
- Ejercicio adecuado: El ejercicio ayuda a fortalecer los músculos y las articulaciones de tu mascota a la vez que mejora la movilidad y le ayuda a mantener un peso saludable. Eso sí, evita el exceso de ejercicio en cachorros en crecimiento y ajusta la intensidad del mismo a las necesidades de su mascota y su edad.
- Llévalo a revisiones periódicas con tu veterinario: Programa exámenes regulares con el veterinario para detectar y tratar problemas de salud en sus etapas iniciales. Recuerda, ¡un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado puede marcar la diferencia!
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