Una perra de 8 años acude a consulta por debilidad en las extremidades traseras

En el artículo de hoy os traemos un caso clínico protagonizado por Ako, una perrita de ocho años de edad que acudió a consulta en la Clínica veterinaria Kivet Valencia Osito con síntomas de debilidad en sus patas traseras.

¡Adéntrate en este post y conoce su historia!

Motivo de la visita

Las propietarias de Ako notaron una debilidad marcada en un tercio de sus extremidades posteriores durante los paseos, donde se negaba a caminar y evitaba subir al sofá o a la cama. De hecho, en uno de sus intentos experimentó una caída preocupante de espaldas. Destacaron además, que notaban una notable disminución de fuerza en las extremidades posteriores de Ako.

Hallazgos de la exploración

Se procedió a realizar una exploración física, la cual reveló que Ako sufría dolor lumbar y debilidad del 1/3 posterior. Se observaron déficits propioceptivos, especialmente en la extremidad posterior izquierda. Además, se identificó dolor profundo y superficial en estas áreas.

Pruebas diagnósticas

Las radiografías que se realizaron en primera instancia revelaron que Ako tenía espondiloartrosis en las vértebras lumbares, además de un edema entre sus vértebras L2 y L4.

Tras enviar los rayos x a los traumatólogos, se citó a Ako para que acudiese a la Clínica, y tras realizar un mielotac, se confirmó la presencia de hernias discales. A nivel de T11-T12, L1-L2, L2-L3 y L3-L4 se observó espondilosis ventral.

Además, múltiples discos intervertebrales presentaban signos de degeneración, con mineralización distrófica y colapso parcial. Por otro lado, se observó material extradural mineralizado en la parte ventral del canal vertebral a nivel de T12-T13, lateralizado hacia la izquierda y material extradural mineralizado en la parte ventral del canal vertebral a nivel de L3-L4, lateralizado hacia la derecha, causando compresión severa y leve-moderada de la médula espinal, respectivamente.

Por último, también se percibieron leves protrusiones dorsales de los discos intervertebrales L1-L2 y L2-L3, aunque en este caso, en dichos niveles la compresión medular no era significativa.

Diagnóstico

Tras la realización de todas las pruebas pertinentes, el diagnóstico fue claro: Ako presentaba hernias discales debido a:

• Extrusión discal a nivel de T12-T13, lateralizada a la izquierda, causando compresión severa de la médula espinal.

• Extrusión discal a nivel de L3-L4, lateralizada a la derecha, causando compresión leve-moderada de la médula espinal.

Tratamiento quirúrgico

Se procedió a anestesiar a Ako, y en colaboración con traumatólogos externos, se llevó a cabo una hemilaminectomía en los espacios T12-T13 y L3-L4.

Por otro lado, se extrajo contenido discal extrusionado, aliviando la compresión severa en T12-T13. Después de este procedimiento, la medula tenía muy buen aspecto.

Del espacio L3-L4 no se extrajo contenido discal pues es una Hansen tipo II no extrusionada, por lo que se realizó una ventana latero-dorsal generosa para que la medula quedase libre y descomprimida.

Por último, se procedió a cerrar por capas con sutura monofilamento absorbible 2/0 y 3/0 en piel intradérmica.

Toda la cirugía transcurrió sin complicaciónes, y Ako se despertó correctamente de la anestesia.

Tratamiento médico

Posterior a la cirugía, Ako recibió un tratamiento integral que incluyó:

• Cefalexina, Robenacoxib y Paracetamol para el manejo del dolor.
• Gabapentina para controlar posibles neuropatías.
• Recomendaciones de reposo, paseos controlados y monitoreo de micción y defecación.

Evolución

En los primeros cinco días postoperatorios, Ako estuvo postrada y sin caminar, y presentaba dolor profundo junto con reflejo de retirada presente.

A partir de los 5 días, intentó levantarse, pero aún así no caminaba, por lo que se procedió a ayudarla mediante un arnés o una toalla.

Después de estos 10 días, Ako comenzó a caminar, aunque sin apoyar la extremidad posterior izquierda, por lo que se la remitió a una clínica de rehabilitación.

Poco a poco, Ako se va recuperando, y desde Kivet, esperamos que muy pronto vuelva a caminar y disfrutar como se merece. ¡Es toda una luchadora! Tanto nuestro equipo como los maravillosos cirujanos traumatólogos con los que colaboramos durante todo el proceso estamos felices de ver como evoluciona.

Clínica donde se le atendió

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