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Las especies invasoras, también conocidas como especies exóticas invasoras, son organismos que se han introducido en un nuevo entorno fuera de su área de distribución natural y, una vez allí, causan un impacto negativo en el ecosistema, la biodiversidad o la salud de las especies preexistentes.
En España, como en muchos otros lugares del mundo, las especies invasoras son consideradas una amenaza importante para la biodiversidad y el medio ambiente debido a que posee una gran variedad de ecosistemas y, por tanto, es susceptible a la introducción de especies invasoras debido a su ubicación geográfica y turismo.
En este artículo vamos a hablar sobre las especies invasoras en España y comentaremos más en profundidad la amenaza que suponen para el ecosistema.
Especies invasoras en España
Tortuga de Florida
Esta tortuga es originaria del sureste de Estados Unidos y se introdujo en España en la década de 1980 como animal de compañía debido a su atractivo aspecto y su comportamiento. Sin embargo, cuando las personas las liberaron en la naturaleza o escaparon de sus recintos, se establecieron poblaciones silvestres en diversas regiones de España.
En la actualidad, estas tortugas invasoras compiten con las especies autóctonas de tortugas acuáticas y otras especies de fauna acuática. Además, su presencia puede alterar los ecosistemas acuáticos al consumir plantas acuáticas y afectar la calidad del agua teniendo un impacto negativo en la biodiversidad y el equilibrio de los ecosistemas acuáticos.
Cotorra gris y cotorra de Kramer
Las cotorras grises y cotorras de Kramer, originarias de América del Sur, fueron introducidas en España como animales de compañía y, con el tiempo, estas aves se han establecido en varias ciudades españolas.
Sin embargo, su presencia en el entorno natural ha comenzado a generar problemas ya que compiten con las aves autóctonas por recursos como alimento y nidos. Su competencia con las especies nativas afecta al ecosistema local desplazando y amenazando a las aves autóctonas.
Visón americano
Aunque en España ya existe una especie de visón, el europeo, la llegada de los visones americanos supuso una alteración a las poblaciones autóctonas ya que los visones americanos son depredadores de la fauna local.
El visón americano se introdujo en España inicialmente con fines comerciales en la industria peletera. Se criaron en granjas para obtener sus pieles que eran muy valoradas para la confección de prendas de vestir. Con el tiempo, el visón americano demostró ser altamente adaptable al entorno local y encontró refugio y alimento en los ecosistemas acuáticos de España, lo que facilitó su supervivencia y reproducción en estado salvaje.
En la actualidad, la presencia del visón americano compite con la del europeo, una especie autóctona en peligro crítico de extinción ya que este primero es mucho más agresivo que el autóctono.
Cerdo vietnamita
Esta especie se popularizó en España en parte gracias a la exposición mediática que recibió, especialmente cuando el famoso actor George Clooney presentó a su propio cerdo vietnamita como animal de compañía. La noticia se difundió rápidamente a nivel mundial, y la apariencia simpática y tranquila de estos animales cautivó a muchas personas, que comenzaron a adquirirlos como mascotas a través de las tiendas de animales.
En cuanto a su convivencia, el cerdo vietnamita es generalmente tranquilo e inteligente pero el problema radica en su mantenimiento. A menudo, las personas subestiman su tamaño y sus necesidades ya que cuando estos cerdos alcanzan su peso y tamaño reales, su cuidado es un auténtico problema especialmente si no se cuentan con las instalaciones adecuadas.
Esto ha llevado a que muchos cerdos vietnamitas sean abandonados o liberados en la naturaleza compitiendo con el jabalí nativo que, al cruzarse con él da lugar a animales híbridos conocidos como el “cerdolí” o el “cerdalí”. Estos híbridos tienen una gran capacidad productiva, dando lugar a camadas de más de 7 lechones dos veces al año, lo que supera con creces la tasa de reproducción de los jabalíes nativos.
Como resultado, el cerdo vietnamita ha provocado un desplazamiento del jabalí autóctono.
Pitón real
La serpiente pitón real, originaria de África, puede llegar a pesar hasta 1,5 kg, medir más de 1,50 metros y vivir más de 40 años, algo que hace que en muchas ocasiones sean abandonadas en el campo.
En la actualidad, es considerada una especie invasora en España por varias razones:
La primera, su capacidad de reproducción es alta, y las serpientes abandonadas pueden reproducirse en el ambiente local, aumentando su población de forma descontroladas. Además, su adaptación exitosa al entorno, que les proporciona una fuente constante de alimento y refugio les permite prosperar y competir con las especies nativas.
Las principales especies amenazadas por la pitón real son los pequeños roedores, como ratones y ratas, que son su principal fuente de alimento. Esta competencia por los recursos alimenticios puede tener un impacto negativo en la fauna autóctona, especialmente en aves rapaces, mamíferos y reptiles que también se alimentan de estos roedores.
Mapache
El mapache es un mamífero originario de América del Norte que se comenzó a introducir en España debido a su representación en la película Disney de “Pocahontas”, lo que la hizo muy popular como mascota.
Sin embargo, a pesar de su apariencia simpática, el mapache no siempre es un animal dócil ya que son animales inteligentes y astutos, capaces de abrir puertas, ventanas o jaulas. Esta inteligencia adaptativa a menudo lleva a problemas en la convivencia con sus dueños ya que puede causar daños y conflictos en el hogar.
Además, su capacidad para adaptarse al clima continental de España les permite prosperar en el entorno local haciendo que se conviertan en auténticas plagas en áreas cercanas a ríos, donde compiten con nutrias, garduñas y zorros autóctonos. Su naturaleza omnívora hace que puedan causar daños en campos de cultivo, huertas y afectar a la población de anfibios, aves y pequeños huevos.
Erizo egipcio
El erizo egipcio, también conocido como erizo de orejas largas, se ha convertido en una especie invasora en España debido a su introducción como mascota exótica. Su popularidad como animal de compañía se debe en parte a su aspecto distintivo y atractivo, así como su comportamiento nocturno, lo que lo hace atractivo para algunos propietarios. Sin embargo, cuando las personas no pueden cuidarlos adecuadamente o deciden liberarlos a la naturaleza, estos erizos egipcios pueden causar problemas.
Al igual que las otras especies invasoras, una de las razones que ha hecho que prolifere esta especie es debido a su capacidad para adaptarse al entorno local y su rápida reproducción.
¿Cómo afectan las especies invasoras a las especies autóctonas?
Las especies invasoras afectan a las especies autóctonas al competir por recursos como alimentos, territorio y hábitat. Esto puede llevar a la disminución o desplazamiento de las especies nativas, alterando el equilibrio ecológico y reduciendo la biodiversidad.
Dichas especies invasoras también pueden transmitir enfermedades, depredar a las especies autóctonas y modificar los ecosistemas, lo que causa un impacto negativo en las poblaciones y la salud de las especies locales.
En definitiva, es crucial ser consciente de los riesgos y consecuencias de la introducción de las especies invasoras en el entorno natural. Estas especies, que a menudo se introducen como mascotas exóticas o por otros motivos, pueden tener un impacto devastador en la biodiversidad y los ecosistemas locales al competir con las especies autóctonas.
Este tipo de especies invasoras a menudo tienen requisitos muy específicos, de ahí que los veterinarios de animales exóticos sean quienes mejores valoren su estado de salud.