Conocer los parásitos que pueden afectar a las orejas de tu perro es muy importante para detectar rápidamente su aparición. Aunque en los casos más leves solo produce incomodidad y picor, si la situación empeora, la vida y la salud de tu perro pueden verse gravemente afectadas.
Por este motivo, vamos a entrar en detalle sobre los parásitos en las orejas de tu mascota. ¡Toma nota!
¿Cuáles son los tipos de parásitos que pueden dañar las orejas de los perros?
A continuación, vamos a nombrar los parásitos más comunes que pueden afectar a los oídos de los perros. Estos son:
- Pulgas
- Garrapatas
- Sarna: demodéctica, sarcóptica, otodéctica y Cheyletiella
- Piojos
- Leishmaniosis cutánea
Cada uno de estos puntos se merece una introducción para que conozcas de qué se trata.
Pulgas
Son los parásitos más comunes, puesto que pueden estar presentes a lo largo de todo el año, siendo más propensos en meses cálidos y húmedos.
Su tamaño y rapidez dificultan su detección, pero con facilidad se puede localizar su excremento. Las pulgas para alimentarse chupan la sangre del perro y mediante la saliva pueden producir alergia provocando que el perro se rasque excesivamente, ocasionándose en algunos casos heridas.
No es muy frecuente, pero el contacto con este parásito puede transmitir enfermedades contagiosas, además, la anemia puede ser un problema si el animal presenta una invasión masiva.
Las pulgas pueden picar a las personas y transmitir algunas enfermedades zoonósicas. Para eliminarlas es recomendable acudir al veterinario para que pueda extraerlas o seguir sus indicaciones.
Conoce los tipos de antiparasitarios externos que existen para pulgas.
Garrapatas
Son parásitos peligrosos, pero debido a su gran tamaño son fáciles de localizar revisando el pelaje del perro.
El ciclo de las garrapatas incluye varias fases y para pasar de una a otra tienen que alimentarse de la sangre de un animal, posteriormente se sueltan, cambian de fase y vuelven a hacer lo mismo, hasta que pueden reproducirse. Mediante este proceso transmiten graves enfermedades y pueden producir anemia o un shock paralizante si el animal presenta una invasión masiva.
Para retirarlas se debe utilizar material apropiado por lo que se aconseja acudir al veterinario lo antes posible.
Puedes leer más sobre las garrapatas en nuestro artículo: Garrapatas qué son y cómo eliminarlas
Sarna
Es una enfermedad de la piel causada por una concentración de ácaros, constituyendo una de las causas fundamentales de picazón o prurito intenso en los perros.
Se identifican como sarna canina estos tipos:
- La sarna demodéctica.
- La sarcóptica.
- La sarna otodéctica.
- La sarna por Cheyletiella.
Excepto la sarna demodéctica, los demás son muy contagiosos.
La sarna debe ser diagnosticada por el veterinario, cuyo objetivo será identificar el tipo de ácaro que la está causando, para ello realizará varias pruebas, como raspados para obtener muestras superficiales de piel y examen de los folículos pilosos.
Conoce el caso de Doggy y el motivo de por qué se descartó que tuviera sarna sarcóptica.
Ácaros de la sarna demodéctica
Forman parte de la microfauna habitual de la piel del perro siendo nocivos solo cuando se concentran en altas cantidades, pero no son contagiosos.
Puede presentarse en dos tipologías: localizada y generalizada.
- La sarna demodéctica localizada es una patología leve que suele resolverse sin problemas en la mayoría de los casos. Entre sus síntomas destaca la descamación, pérdida localizada de pelo y manchas oscuras.
- La sarna demodéctica generalizada es una patología grave que puede provocar la muerte del perro. Inicialmente se observa pérdida localizada de pelo, pero con el tiempo se producen paralelamente otras complicaciones. La infección bacteriana de la piel o piodermia es la complicación más habitual, que incluye inflamación de ganglios, prurito, supuración y mal olor.
Ácaros de la sarna sarcóptica
Son parásitos microscópicos que producen irritación en la piel, caída de pelo y costras en las puntas de las orejas. Pueden contagiarse al ser humano además de a otros animales. Si no se trata puede producir trastornos en el perro pudiendo ocasionar su muerte, por lo que es importante que acudas inmediatamente al veterinario, para que el perro sea diagnosticado y empezar con el tratamiento oportuno.
Su contagio se produce principalmente por contacto directo, además de por utensilios y superficies contaminadas.
Los síntomas suelen desaparecer cuando el perro comienza a curarse, ya que disminuyen las posibilidades de reinfección.
Durante el tratamiento, cuando manipules al perro, es recomendable que utilices guantes y te laves bien las manos con agua y jabón al terminar. Además, es recomendable limpiar y desinfectar toda superficie con la que tu perro haya entrado en contacto, ya que estos ácaros pueden vivir hasta 21 días fuera del huésped.
Sarna Otodéctica
Surge por un ácaro que vive en el conducto auditivo del perro, afectando normalmente a ambas orejas. Es muy contagiosa para gatos y perros, pero no para humanos. Por lo que todos los gatos y perros que hayan estado en contacto con el perro afectado deben ser tratados.
Síntomas de la sarna otodéctica
Los síntomas son los siguientes:
- Prurito o picazón intenso.
- Pabellones auditivos enrojecidos, llenos de costras y pústulas.
- Secreción de cera seca de color marrón oscuro y maloliente.
En estos casos es importante que acudas a tu veterinario y sigas sus instrucciones para completar el tratamiento y evitar la reinfestación.
Sarna por Cheyletiella
Se debe a un ácaro de color rojo denominado Cheyletiella, habita en la superficie de la piel y sobrevive 10 días en ausencia de huésped. Aunque es muy contagiosa, cada vez es menos frecuente, ya que los productos antipulgas eliminan este tipo de ácaro.
Síntomas de la Cheyletiella
A continuación, los cuatro síntomas o signos principales:
- Erupción de color rojo.
- Gran cantidad de piel escamosa, parecido a la caspa.
- El prurito o picazón puede ser intenso o no aparecer en absoluto, por lo que no hay que descartarla si el perro no se rasca.
- Con un peine para pulgas en ocasiones pueden ser visibles los ácaros o huevos.
Trombiculosis o ácaros de la cosecha
Es una patología que afecta principalmente a animales que tienen contacto con el exterior, ya que la larva anaranjada que lo provoca habita en praderas de hierba. Suele observarse entre el final del verano y el otoño.
Si el perro esta contagiado por estos parásitos se podrán observar en la punta de la oreja pequeños puntos naranjas.
Pediculosis o piojos
Son parásitos externos relativamente comunes, aunque en menor medida que las pulgas o las garrapatas. Normalmente se encuentran en el manto del animal, pero pueden extenderse hasta las orejas.
Afectan normalmente a animales inmunodeprimidos o enfermos, alimentándose de su sangre y en algunas ocasiones pudiendo llegar a ser vectores de multitud de enfermedades.
Se aconseja acudir a la clínica veterinaria más próxima, ya que cuando se produce una infestación generalizada, pueden aparecer otros problemas de salud asociados, por lo que es imprescindible su detección lo antes posible, y la aplicación de un tratamiento efectivo para eliminarnos y prevenir su reaparición.
Síntomas de los piojos en perros
Esta lista puede ayudarte a conocer los síntomas:
- Podemos encontrar liendres o huevos.
- Se observa que el perro frota, muerde y araña el área afectada.
- Puede mostrar el pelaje muy áspero y mate.
- Irritación severa.
- Aparición de diversas enfermedades dermatológicas. Por ello es importante que tu clínica cuente con servicio de Dermatología veterinaria.
- Detectamos un estado de ansiedad e inquietud constante en el perro.
- Conforme avance la infestación, se observarán áreas sin pelo y heridas.
- En casos más graves, el perro puede padecer anemia.
La leishmaniosis cutánea en perros es la más frecuente causando lesiones en las orejas de origen inmune por vasculitis necrotizante. La vasculitis es producida por un parásito que produce un efecto visible de necrosis en la punta de las orejas del animal.
¿Cómo prevenir los parásitos en las orejas del perro?
La infección por ácaros no siempre se puede prevenir, pero incorporando medidas higiénico-dietéticas podremos reducir el riesgo de que estos parásitos infesten el conducto auditivo del perro.
- Revisar y limpiar las orejas del perro de forma periódica.
- Secar bien el pabellón de la oreja cuando lo bañes.
- Lavar y desinfectar periódicamente sus accesorios.
- Proporcionar una alimentación saludable y de calidad a tu perro para mantener sus defensas en un estado óptimo.
- Llevarlo al veterinario con la frecuencia apropiada para cada caso.
- Seguir el calendario de desparasitación interna y externa de forma correcta.
Por último, recuerda que si no vienes con tu mascota, en Kivet no podremos dispensarte los medicamentos necesarios para la desparasitación, según la ley general sobre el medicamento (real decreto 1/2015 de 24 de julio) establece que los centros veterinarios no pueden dispensar medicamentos, tanto de prescripción como de no prescripción,
sin haber revisado previamente al animal en consulta. ¡Ven con tu perro! ¡Estará en buenas manos!
Finalmente, por todo lo expuesto en el artículo es muy importante llevar a tu mascota al veterinario para las desparasitaciones. En Kivet, somos expertos veterinarios, con más de 65 clínicas repartidas entre España y Portugal, con planes de salud para cuidar a tus mascotas en todo momento.