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La obesidad en perros y gatos es un problema de salud cada vez más común en las mascotas, y es importante prevenirla y tratarla adecuadamente por varias razones.
El exceso de grasa en perros y gatos puede reducir significativamente su calidad de vida. Puede provocar problemas de movilidad, dificultad para respirar, y disminución de la energía y la actividad física. Esto puede llevar a una disminución en la esperanza de vida y limitar las actividades que el animal puede disfrutar.
Pero…¿por qué está obeso?
- Falta de ejercicio y no llevar una dieta adecuada.
- Ha entrado en la edad senior y su actividad ha disminuido.
- Padece alguna lesión que le produce dolor.
- Otras causas, por ejemplo, la esterilización.
¿Cuáles son las patologías asociadas a la obesidad en perro y gatos?
- Diabetes.
- Afecciones dermatológicas.
- Disminución de la longevidad.
- Problemas hepáticos.
- Problemas cardiorrespiratorios.
- Alteraciones de la tiroides.
- Disminución de las defensas.
- Enfermedades osteoarticulares.
¿Mi perro está obeso?
Un perro está obeso cuando pesa más del 20% del peso ideal. Visualmente, podemos saber si está obeso cuando:
- Hay una capa visible de grasa sobre la caja torácica, la zona lumbar y la base de la cola.
- La cintura no se aprecia.
- Hay un incremento visible de la zona abdominal.
¿Mi gato está obeso?
Al igual que con los perros, cuando sobrepasa más del 20% del peso ideal, podemos decir que está obeso.
- Echa un vistazo a tu gato desde arriba. Deberías poder ver una cintura entre la caja torácica y sus caderas. Si tu gato tiene demasiado pelo, baja las manos por los lados para sentir la hendidura.
- Otro vistazo de lado. Un gato en forma no debe mostrar su barriga “colgando”.
- Toca a tu gato. Palpa el torso de tu gato, sin presionar demasiado fuerte. Debes ser capaz de distinguir su columna vertebral y las costillas claramente.
Por aquí te dejamos algunos consejos para controlar el sobrepeso de tu gato.
Preguntas frecuentes sobre la obesidad en perros y gatos
Consulta con tu veterinario de confianza para implantar un plan de pérdida de peso seguro y efectivo, que puede incluir cambios en la dieta, incremento en la actividad física y monitoreo regular del progreso.
Una dieta baja en calorías pero rica en nutrientes es fundamental. Pueden ser necesarios alimentos específicos para la pérdida de peso, formulados para satisfacer las necesidades nutricionales sin exceder las calorías.
Es siempre esencial que una dieta enfocada a tratar la obesidad esté respaldada por un experto.
Si tu mascota ya está obesa, consulta a tu veterinario para diseñar un programa de pérdida de peso seguro y efectivo. Evita realizar cambios drásticos en la dieta sin supervisión profesional.
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